El verano es una época del año donde las playas se invaden de sombrillas, neveras, toallas y rastrillos. La estación más esperada para huir de la ciudad y refugiarse bajo el sol abrasador y el agua fresca del mar.
En verano cualquier excusa es buena para pasar un día agradable en cualquiera de las playas que tenemos a nuestro alrededor. Sin embargo, disfrutar de ellas lleva consigo un desgaste. Por eso, no debemos olvidarnos que aunque estemos pasando un momento relax, debemos seguir siendo sostenibles y seguir respetando y protegiendo nuestras playas.
Y es que con pequeños gestos, podemos seguir conservando nuestras playas a la vez que disfrutamos de ellas. Aquí van cinco consejos muy sencillos y que pueden hacer mucho por sus ecosistemas.
1. Usar protección solar que no contamine
Un día ideal de playa no puede estar completo sin nuestra crema solar que nos protege de los diferentes rayos que nos llegan del sol (UVA, UVB e IR). Por eso, elegir un producto que no contamine el mar es la mejor opción. Hoy en día podemos encontrar cremas ecológicas que son mucho mejor que los protectores solares químicos que son tóxicos para el medio ambiente.
2. Evitar hoteles construidos en plena playa
Muchas de nuestras playas han sido invadidas por grandes bloques de hormigón, que no respetan el ecosistema de nuestras playas y que a la vez generan muchos residuos. Elegir opciones respetuosas con el medio ambiente, como instalaciones con ambientes sostenibles, que respetan la naturaleza, el ahorro de energía y la vida green es una decisión que ayuda a proteger nuestras playas.
3. La arena no es un souvenir
En ciertas ocasiones, se han dado casos de personas que por llevar una botella llena de arena de playa en la maleta, han sido detenidas. Y es que este gesto perjudica gravemente el medio ambiente. A simple vista parece un gesto sin importancia, pero en ecosistemas frágiles tiene consecuencias graves. Si lo hiciera todo el mundo, estaríamos sustrayendo todo aquello que la naturaleza ha tardado años en crear.
4. No utilizar botellas de plástico
Se dice que si seguimos así, en 2050 nuestros océanos tendrán más plástico que pescado en sus aguas. Por ello, y para tratar de frenar esto, hay que evitar comprar botellas de plástico y más cuando vamos a pasar un día agradable a la playa. Las cantimploras, bidones o termos pueden ser el sustituto perfecto.
5. Cero residuos
La cuestión es muy sencilla: dejar todo limpio. Llevar siempre con nosotros una bolsa para recoger nuestra basura es algo que no cuesta nada. Además, muchas de las playas disponen de cubos de basura donde depositar nuestros envoltorios y envases, a la vez que en muchos casos, podemos incluso reciclarlos.
Siguiendo estos consejos estaremos ayudando a cuidar de nuestras playas, mientras las llenamos de vida y buen ambiente. Porque no hay que olvidar que las playas son de todos, y debemos respetarlas.